Un masajeador es un aparato indispensable para relajarse, junto con una taza de té y un buen libro. Existen varios tipos de masajeadores:

• Masajeador de cuello y hombros. Este tipo de masajeadores están compuestos por una banda que se sujeta con las manos y que rodea la zona de los hombres y el cuello, aunque se puede mover por el resto de la espalda. Incorpora bolas de masaje que giran a distintas velocidades para lograr un masaje shiatsu en la zona donde se aplica.
• Almohada de masaje. Funciona de forma similar al masajeador de cuello y hombros, pero en lugar de sujetarlo con las manos, se coloca sobre una superficie horizontal (la cama, un sillón reclinado, etc.) y masajea mediante rodillos giratorios la zona del cuerpo que coloquemos encima. Se suele recomendar para cuello, hombros y espalda.
• Masajeador de pies. Existen diversos modelos de masajeadores de pies, algunos de ellos son eléctricos y cuentan con rodillos que se mueven solos para masajear la zona, mientras que en otros productos es el usuario el que tiene que mover los pies contra rodillos específicamente colocados para aliviar la tensión de la zona. Los hay disponibles con efecto calor, vapor, etc.
• Pistola de masaje. Este accesorio de masaje se ha puesto muy de moda en los últimos años y debes saber que es una herramienta de trabajo habitual entre los fisioterapeutas. Se trata de una masajeadora muscular de tejido profundo ideal para tratar puntos concretos del cuerpo que notamos doloridos o agarrotados. Se puede usar sobre distintas zonas: pies, espalda, cuello, brazos, etc. La marca Theragun se caracteriza por fabricar pistolas mini, ideales para llevar en el bolso.
• Sillón masajeador. Los sillones de masaje están pensados para dar un tratamiento integral, pues su amplia superficie permite que traten cuello, espalda, lumbares y piernas. No se trata de un masajeador barato, pero su precio está más que justificado por sus grandes dimensiones y su doble funcionalidad (tienen la apariencia de un sillón). Puedes encontrar diversos modelos, incluidos los de VidaXL, y son ideales para usar a diario mientras se ve la televisión, se lee un libro o se duerme la siesta.
• Respaldo masajeador. Si ya cuentas con un sillón o una silla y no quieres comprarte un sillón masajeador, puedes optar por un respaldo con función masaje. Este tipo de dispositivos se coloca sobre el respaldo y el asiento de una silla de oficina, un sofá o un sillón, y masajea el cuello y la zona de la espalda, pudiendo aplicar también calor según el modelo. Son fáciles de transportar y mucho más económicos que los sillones con masaje.
• Masajeador de piernas. Estos masajeadores están pensados para tratar por compresión piernas cansadas, varices, hinchazón, etc. Funcionan mediante un sistema de bolsas de aire que se inflan y desinflan provocando alivio en pies, pantorrillas y muslos. Hyperice es una de las marcas que fabrica este tipo de masajeadores por compresión.
• Masajeador facial. Estos dispositivos están pensados para mejorar el aspecto del rostro, reduciendo las arrugas y relajando los músculos de la cara. Los más buscados son los que producen vibraciones.
• Masajeador capilar. Estos masajeadores se usan sobre el cuero cabelludo para mejorar la irrigación en la zona, lo que se traduce en una menor caída del cabello y un cuerpo cabelludo más sano. Además, resultan relajantes y alivian la tensión muscular.
• Masajeador shiatsu. Varios de los tipos de masajeadores que hemos mencionado más arriba serían masajeadores shiatsu, y es que el nombre hace referencia al tipo de masaje que dan y no a la zona que tratan. La terapia de masaje shiatsu, también llamada acupresión, aplica presión en puntos de acupuntura para evitar dolores y mejorar la salud. En el método tradicional, un profesional aplica fuerza en estos puntos con las palmas de las manos y los dedos, pero en los aparatos de cuidado corporal son bolas giratorias las que se encargan de aplicar fuerza y mover la zona dolorida para provocar una sensación de alivio y bienestar.

Para elegir un buen masajeador cervical, lo más importante es que conozcas qué tipos de masajeadores para cuello existen. Para esta área suelen venderse dos modelos: masajeadores cervicales con electrodos y masajeadores shiatsu. Los primeros relajan la zona mediante impulsos eléctricos que contraen los músculos, mientras que los de shiatsu ejercen presión sobre los músculos como si de un masaje físico se tratase. Son dos técnicas muy diferentes y ambas ofrecen buenos resultados para conseguir un cuello más relajado y libre de tensiones. 

No obstante, hay que tener en cuenta que los masajeadores cervicales con electrodos solo sirven para el cuello, mientras que muchos modelos de masajeadores de cuello shiatsu puede usarse en otras zonas corporales (hombros, espalda e incluso piernas). Como el cuello suele ser una zona bastante sensible y mucha gente sufre dolores cervicales, existe un amplio surtido de masajeadores de cuello y seguro que encuentras un masajeador barato que dé respuesta a tus necesidades.

Los masajeadores eléctricos son un excelente aliado para combatir desde casa el dolor corporal. No pueden reemplazar a un fisio cuando llega el momento de acudir a consulta, pero sí pueden espaciar las visitas y producir una gran sensación de alivio y confort cuando se usan. Por ello, además de darles un uso terapéutico, se pueden usar con un propósito meramente placentero. Existen masajeadores eléctricos específicos para distintas partes del cuerpo, desde el cuello a los pies, así como otros más genéricos que se pueden usar en distintas zonas corporales según necesidad. En resumidas cuentas, y pese a que los masajeadores eléctricos no pueden reemplazar a un profesional de la fisioterapia, sí resultan útiles para:

• Aliviar zonas del cuerpo con molestias musculares
• Relajar los músculos y aliviar la tensión
• Aumentar el riego sanguíneo en las zonas tratadas

Los masajeadores por infrarrojos proporcionan calor por irradiación y lo habitual es que vayan asociados a otro tipo de masajeadores, para así ofrecer calor por infrarrojos a la vez que se masajea la zona con bolas giratorias, rodillos, pulsaciones, vibradores, etc. Por su parte, los masajeadores con electrodos estimulan la zona mediante pequeños impulsos eléctricos que hacen que los músculos se contraigan. Se trata, por lo tanto, de dos tipos de masajeadores muy distintos. Tanto la aplicación de calor como la electroestimulación son dos técnicas que se usan a nivel profesional para el tratamiento muscular, por lo que ambas pueden serte de utilidad en casa y, de hecho, pueden ser combinables. 

El masaje con electrodos se recomienda por ejemplo para tonificar músculos, reducir la flacidez (en glúteos, abdomen, brazos y piernas sobre todo) y aliviar contracturas, trombosis y atrofias. Por su parte, los masajeadores con infrarrojos alivian contracturas y otras dolencias musculares si se usan en combinación con otras técnicas de masaje, como los masajeadores shiatsu con efecto calor.

Los sillones de masaje son muy útiles para relajar y destensar la espalda, así como la zona del cuello y las piernas si el modelo de sillón incluye estas zonas en su superficie de masaje. Disfrutar de una silla masajeadora al final del día ayuda a aliviar las tensiones acumuladas y mejora la circulación sanguínea en esa zona, haciendo que el área se sienta menos congestionada. 

Asimismo, este tipo de sillones pueden aliviar dolores en la zona lumbar, cervical o dorsal, previniendo su aparición y suavizándolos una vez han hecho acto de presencia, aunque en caso de contractura o dolor intenso siempre se recomienda acudir a un masajista profesional que pueda evaluar el problema real.